Para muchos de vosotros, una de las dudas y de los miedos cuando estáis volando, es la colisión con pájaros. Desde Escuela de Aviadores vamos a despejar estas dudas. En este caso, nos centraremos en los buitres, muy presentes en la geografía española. Estas aves, por su gran masa y por las zonas que habitan suelen ser el mayor riesgo cuando estamos en vuelo.
En España, los buitres son sin duda el ave más grande con el que nos vamos a encontrar. Tenemos dos tipos de buitres: el buitre leonado, qué pesa entre 4,5 y 10,5 kilos y mide entre 230 cm y 270 cm, y el buitre negro qué pesa entre 7 y 12, 5 kilos y mide entre 250 cm y 295 cm. También tenemos el alimoche o el quebrantahuesos de los que hablaremos en otra ocasión.
Un dato de física: energía es igual a un medio de la masa por la velocidad al cuadrado (E = ½ mv2)
Un buitre típico pesa 8 kilos y vuela a unos 65 km/h. El impacto que experimenta una avioneta (que vuela a 180 kilómetros por hora) contra un buitre, es de ½ x 8kg x (68/s)2 = 18.496J
Ahora que ya sabemos cuál es la potencia con la que impactaremos con un buitre, vamos a ver cuál es la manera de minimizar los riesgos de colisión en la medida de lo posible. Para esto es muy útil conocer el comportamiento de vuelo de estas grandes aves planeadoras. Entendamos, que los buitres vuelan a vela, por lo tanto, los buitres vuelan aprovechando las ascendencias producidas por: las térmicas, las ascendencias orográficas y las ondas de montaña.
Los buitres ganan altura girando dentro de las ascendencias térmicas y planean hasta la siguiente térmica. Cuando el buitre vuela dentro de la ascendencia térmica, trata de describir giros con el menor radio posible, para ello reduce su velocidad volando entre 35 y 45 km/h, de esta manera aprovecha el centro de ascendencia. En vuelo rectilíneo, los buitres vuelan entre térmicas a una velocidad que oscila entre los 60 y 80 km/h.
¿Cuándo vuelan los buitres y a qué altura?
Los buitres vuelan cuando hay condiciones propicias para la formación de las ascendencias, ya sean de origen térmico u orográfico. En invierno, hemos de tener en cuenta que:
- La altura que pueden alcanzar las térmicas no suele sobrepasar los 1500 pies AGL.
- El periodo de actividad térmica está limitado de 12h a las 17h.
En el periodo estival, los buitres vuelan más horas y a horas más tempranas.
En verano la altura que alcanzan las térmicas es mayor, y por lo tanto, podremos encontrarnos con buitres hasta los 13 000 pies AGL.
En la montaña, podemos encontrarnos con buitres explotando el ascenso de la ladera todo el año. Si las condiciones térmicas son malas, pero hay ladera, nos vamos a encontrar a muchos buitres concentrados en la franja ascendente de la ladera.
¿Qué tenemos que hacer como pilotos para minimizar el riesgo de colisión con los buitres?
Para saber qué medidas de prevención hemos de tomar como pilotos, hemos de fijarnos en las costumbres de vuelo que tienen los buitres y de esta misma manera aplicar que:
- Todos los pilotos tenemos de mirar fuera constantemente con especial atención cerca de las colonias de buitres.
- Los pilotos en las proximidades de las zonas con mayores poblaciones de aves hemos de moderar la velocidad.
- Cuando planifiquemos la ruta, tendremos en cuenta el sobrevuelo de las principales colonias o buitreras para estar alerta de su presencia, ante el mayor riesgo de colisión.
- Como pilotos tenemos que conocer la altura de la capa convectiva (el techo de las térmicas).
- Las buitreras, principalmente en la montaña, suelen ser visibles por las manchas blancas producidas por los excrementos de los propios buitres.
- Va a ser fundamental la eliminación, por parte de AESA para los ULM, de volar con un techo de 1000 pies, ya que es la capa del espacio aéreo donde hay más accidentes y se encuentran la gran mayoría de las aves.
Maniobras evasivas:
Para poder evitar un choque con un buitre hemos de tener tiempo para poder advertir su presencia, por tanto, estas recomendaciones que se van a citar sólo son útiles a velocidades inferiores a 300 km/h y para aeronaves pequeñas con gran capacidad de maniobra. Los buitres en vuelo rectilíneo prestan su atención al terreno, por lo que no hemos de suponer que han advertido nuestra presencia; será obligación de los pilotos realizar las maniobras evasivas adecuadas.
- No adelantar o cruzar nunca a los buitres por debajo.
- Los buitres, ante cualquier amenaza inesperada, esconden las salas e inician un fuerte descenso. Para adelantarnos o cruzarnos con ellos lo haremos por encima. De no ser posible, les adelantaremos manteniendo la suficiente separación horizontal.
- De encontrarnos frontalmente, la maniobra evasiva más segura es ganar altura, tirar de la palanca. Ya que los buitres no tienen tanta capacidad de ascenso como nosotros, y por regla general nos evitarán realizando un descenso. Al tirar de la palanca, disminuiremos nuestra velocidad y de haber impacto éste será mucho menor.
- Al ascender, los planos de la aeronave protegen del impacto a su empenaje de cola, la cabina y el motor, los puntos qué son las partes más débiles de la aeronave.
- Adoptar el mismo sentido de giro que los buitres presenten en la ascendencia.
No olvidemos, que estas majestuosas aves que surcan nuestros cielos llevan volando toda la vida, y nosotros, los pilotos, apenas llevamos 100 años en el aire. Como somos unos recién llegados, depende de nosotros y sólo de nosotros seguir y cumplir unas mínimas normas de actuación y comportamiento para evitar mayores desgracias.
Desde Escuela de Aviadores te deseamos un buen vuelo.
¡Nos vemos en el cielo!